Una empresa familiar ha de superar las dificultades que conllevan las relaciones entre familia y negocio. El Protocolo de Empresa Familiar es una eficaz herramienta para establecer unas normas claras que faciliten la convivencia presente y futura.
¿Qué es el Protocolo Familiar en la Empresa?
Se define como ”Aquel conjunto de pactos suscritos por los socios entre sí o con terceros con los que guardan vínculos familiares que afectan una sociedad no cotizada, en la que tengan un interés común en orden a lograr un modelo de comunicación y consenso en la toma de decisiones para regular las relaciones entre familia, propiedad y empresa que afectan a la entidad.”
¿Por qué interesa crear un Protocolo de Empresa Familiar?
Este acuerdo puede ser de gran utilidad para los accionistas mayoritarios de una empresa que constituya un grupo familiar y que deseen establecer las reglas del juego en el funcionamiento interno de su empresa y en especial en lo referente a la toma de medidas. Por un lado es útil para restringir la entrada de nuevos socios en la empresa o en su caso, regular su salida y también para establecer un calendario y unas condiciones de cara a la futura sucesión del negocio a favor de nuevos miembros de la familia cuando los actuales socios decidan retirarse total o parcialmente de la dirección del negocio, así como desvincularse de la propiedad del mismo.
Es muy importante que las empresas familiares definan sus objetivos y la política de actuación en distintas áreas, desde la relativa a la estrategia de negocio como a la financiera, pasando por la inclusión o no de nuevos socios (familiares o extraños), así como la transmisión de la empresa a futuros herederos. Debe ser único y diferente para cada empresa, ya que cada empresa tiene características propias que le identifican y diferencian.
Se trata de un acuerdo que recoge una serie de normas y códigos de conducta, a los que se someten todos los miembros de la familia de mutuo acuerdo y que, en cierto modo, permite profesionalizar la manera en la que éstos gestionan el negocio.
¿Qué aspectos regula?
Entre los principales aspectos que regula podemos destacar:
- la gestión y administración de la empresa familiar,
- la forma y momento en que se llevará a cabo la sucesión delegando la gestión en los sucesores,
- los requisitos objetivos para acceder a los diferentes puestos,
- las remuneraciones de familiares
- la entrada o salida de socios.
A ello se añadirá cualquier otro pacto que pretenda solventar situaciones que, por su trascendencia, son susceptibles de ocasionar conflictos futuros y hacer peligrar la continuidad de la empresa.
En definitiva, el Protocolo Familiar es un documento en el que los socios, los legítimos futuros socios por derechos hereditarios y, eventualmente, otros familiares, plasman determinados acuerdos alcanzados con la finalidad de regular el funcionamiento interno de la empresa familiar en el presente y en el futuro. Siempre es recomendable que el encargado de desarrollo del mismo o de establecer el guión de regulación del protocolo familiar sea un consultor o economista externo independiente a la empresa; con ello se evitará posibles conflictos de interés y de malinterpretaciones.
